Estando próximos a la Navidad me ha venido a la mente esa frase hecha que se repite en estas fechas de “A ver si nos toca la lotería y sino por lo menos que tengamos salud que es lo mas importante” y yo me hice la siguiente pregunta:
¿Qué es lo importante en Navidad?
Salud, dinero y amor las tres condiciones para una navidad y en general para una vida llena de felicidad no? Todos las buscamos permanentemente pero quizás no nos hemos parado a reflexionar la profundidad que hay en estos anhelos. Voy muy brevemente a analizar por encima, que hay de realmente cierto en la necesidad de ellos para con nuestra felicidad.
Salud: Parece imprescindible el tener una buena salud para ser feliz , pero cierto es que hay una cantidad ingente de personas que son tremendamente felices aun teniendo grandes limitaciones de salud. Podría aventurarme a decir de personajes famosos como el caso de Nick Vujicic.

Nació sin extremidades, si, las cuatro. Ni tiene brazos ni piernas y es feliz con su mujer y sus dos hijos, es un orador motivacional, y director de Life Without Limits, una organización para personas con discapacidades físicas.
Hecho este inciso podríamos decir que ¿es posible que se pueda ser feliz aun no teniendo salud? ¿Quizás sea porque Nick tiene mucho de lo otro? Mucho dinero y mucho amor? Es cierto que os he puesto de ejemplo un solo caso, pero, ¿a que no me retaríais a que os enseñe muchos mas? Sabéis en el fondo de vuestro corazón que los hay.
Primera premisa: Salud no es garantía de felicidad.
Dinero: Coches, casas, aviones, lujos de toda clase, todo lo que una persona pueda imaginar pues eso pongo en tus manos. Imagina por un momento que harías si tuvieras todo lo material que quisieras en este mundo. Esta bien, también tienes salud estas con 33 años y forrado hasta las pestañas como se suele decir ¿que harías? ¿Eso es ya la felicidad? De poco te serviría no poder compartirlo con nadie ¿verdad?, aunque no sea fisicamente. Si tan siquiera no pudieras contarle a alguien de lo que te acabas de comprar y compartir esa idea te haría infeliz. Es por eso que gente inmensamente rica, materialmente hablando, ha vivido una vida llena de tristeza e infelicidad incluso terminando en el suicidio. Publicaciones como la del periódico “El Pais” en el 2009 publicaban esta cabecera: “El suicidio de millonarios se extiende como una plaga por las principales economías de Europa”.
Segunda premisa: El dinero no es un garante de la felicidad.
Amor: ¿Alguien conoce a una persona que sintiéndose amada no es feliz? No tendría mucho que añadir aquí o si; Esos niños del Africa que irradian felicidad inclusive con las duras condiciones de vida que tienen (no los que nos sacan los anuncios de las ONG´s que son para darnos pena) los que son filmados con otra espontaneidad. Ellos siguen jugando descalzos en la tierra con un balón hecho con ramitas de arbustos o lo primero que se ha tenido a mano, ellos si que nos dan lecciones de felicidad y amor a todos los que vivimos en la comodidad de lo material.
Tercera premisa: La felicidad es inherente al Amor.
Para concluir con estas meditaciones hago mención a la Sagrada Biblia en (Jn 4, 7–8) “Amados, continuemos amándonos unos a otros, porque el amor es de Dios. El que no ama no ha llegado a conocer a Dios, porque Dios es Amor”
Cuando Juan nos revela que Dios es Amor, nos esta diciendo que Él es ni mas ni menos que nuestra felicidad. Corramos a su encuentro, que esta nochebuena vuelve a nacer para felicidad nuestra el niño Dios.
¡ Feliz Natividad del Señor !
